A veces olvido que tuve una jaula
con dos manos enlazadas a las mías
y dos ojos como puertas abiertas
A veces olvido que amé
o Alicia amó
antes de irse
31.1.13
1-
29.1.13
Fragilidades
Hay tempestades que ni mueven el árbol
pero ese mismo árbol es un fino hilo de araña
que tiembla ante el soplido de un niño
Mañana, la invensible
pero ese mismo árbol es un fino hilo de araña
que tiembla ante el soplido de un niño
Mañana, la invensible
abdica en favor de sus lágrimas
27.1.13
fragmento de esquina en bondi*
... amarilla y desgastada, la hilera de cañas censura el balcón de la señora que no quiere mostrar sus flores, pero siempre una azalea asoma mientras arrutinado, el señor que adorna la puerta de una jaula, acaricia un gato gris, de bigotes depilados.Enciende la luz roja y carrera en marcha, bandadas de veloces equilibristas intentan llegar ilesas sobre empinados tacones de moda, hasta el otro lado de la calle. Algunos pisan escombros. Otros levitan en pentagramas. Alguna cierra los ojos y aparece bajo los párpados de otro en otra esquina y aquí, desde el fondo del vientre de este engendro metálico encendido, se escucha cantar a la dulce Piaff... Volcado en la butaca, el hombre a mi costado duerme, invasivo, sobre mi lado izquierdo mientras mi corazón insiste en hacerse llamar por un nombre que no soy yo ...
* bondi: Del lunfardo de Argentina: Ómnibus
25.1.13
19.1.13
Volverse táctil II
que vengan días de mezclar la piel y ser
fusión de cuarenta dedos cuatro
manos cuatro tibias enlazadas
y dormir solo las palabras
silencio, muchos días de silencio
17.1.13
Volverse táctil
el volumen de tus hombros en mis labios
la dureza de tu piel bajo mi lengua
la firmeza de tus huesos en los míos, presionar
los labios en los dedos, y sentir
la tibieza de los sexos, la fricción
profunda y frecuente y vibrar
y que solo sea un sueño
la dureza de tu piel bajo mi lengua
la firmeza de tus huesos en los míos, presionar
los labios en los dedos, y sentir
la tibieza de los sexos, la fricción
profunda y frecuente y vibrar
y que solo sea un sueño
12.1.13
Fantasmas de Kafka
no quiero ser
abrazada por la hueca
carcasa de un buenhombre
con quien cerrar los ojos y soñar
que son tus manos
Mientras el fantasma
de Kafka me advierte
sobre el peligro del beso tácito
me niego
con quien cerrar los ojos y soñar
que son tus manos
Mientras el fantasma
de Kafka me advierte
sobre el peligro del beso tácito
me niego
a la suavidad del rose
de unos dedos que no saben de tu nombre
y me desintegro en letras
que dibujan
escenarios de mi alma rota
lenguas de sal arriban a las costas
molinos lejanos, plazas rotas
y un libro negro abierto
sobre una cama cerrada
un beso prometido
y un adiós
que me desangra
11.1.13
10.1.13
El silencio de Dios
y que Dios exista!
y que Dios me escuche...
y que Dios sacuda el universo
como quien golpea la mesa
con el puño pesado
... que Dios exista, que alguien
lo dibuje
y que me enseñe
las palabras
que lo invoquen
y que Dios quiera
y que te traiga
hasta las puertas tibias
y que Dios me escuche...
y que Dios sacuda el universo
como quien golpea la mesa
con el puño pesado
... que Dios exista, que alguien
lo dibuje
y que me enseñe
las palabras
que lo invoquen
y que Dios quiera
y que te traiga
hasta las puertas tibias
del infierno
al fuego húmedo
al fuego húmedo
al fuego blando que distante
te afiebra
*
te afiebra
*
el único silencio que me asusta es el de tu prosa, el único
silencio en el que estallo es en el que abre paso
a tus manos
silencio en el que estallo es en el que abre paso
a tus manos
8.1.13
6.1.13
La ausencia de voces tiene sonidos, y resulta
que el mundo se escucha desde la casa vacía
La casa vacía suena a mis pasos
a la pequeña chispa de fuego
que enciende las hornallas
a cacharros que se mueven
agua que llena un jarro y luego hierve
a un cuchillo que pica sobre una tabla de madera
colores vivos vegetales y la soledad
que comienza a oler a rica cena, y que a veces
se pone tan mullida y cómoda
3.1.13
2.1.13
Bla bla blues, Sky II
Esto no es un post, porque el poema que me anega el alma, allí se quedara hasta morir ahogado en su propio caudal de palabras monotemáticas, pero no hablare de él y por las dudas, contendré la respiración, no sea que yo me ahogue antes
Esto no es un post, es mas importante.
Porque la aleatoriedad de la oscilación de la curva del orgullo es igual de impredecible que el vuelo de la mariposa, y por eso merece un espacio en el Congreso sobre La Química desleal, en Banchuria.
El problema de la reciprocidad cuando La Química desleal actúa en seres vivos, puede reflejarse en la relación de mi hermana con Macondo, su perro fiel.
¿Como pudo sucederme a mi? cantaba el cantor cuando, seguramente, también lo pensó Macondo que, acostumbrado a mimar a mi hermana cuando está enojada, tuvo que dormir en el balcón cuando le tocó a él tener su primer berrinche.
Por esto y mucho más es que necesito calcular la alta concentración de idiotismo inserto en el amor cuando tiende a infinito, para lograr el ángulo exacto de apoyo del pie de la equilibrista parada sobre el fino hilo de ganas ¡y necesito averiguarlo urgente! antes que un desequilibrio lleve a la pobre amante de las cornisas, a pique hasta el fondo del mar o ¡lo que es peor! hasta algún rincón lejano donde morirá de amor. El mismo rincón donde una niña llora porque el viento revolcó su barrilete y el
cruel árbol lo asesinó de muerte y nadie los juzgara siquiera.
Esa misma niña dudará cuando empresarios "vampiros" quieran talar un árbol y unos ecologistas "justicieros" convoquen un abrazo fraternal al gigante oxigenante.
¡Ay, la relatividad de las intenciones!
El mismo árbol que la ayuda a vivir, la pone a llorar ¿y que saben los ecologistas dónde hay más oxígeno para ella? ¿y si un poema le da mas oxigeno que un árbol? ¿y si un poeta escribe un poema como bala en la yugular de mi suicida?
No era la intención del poeta
No era la intención del árbol pero
Necesito una tijera para cortar un hueco.
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