3.11.12

Maleducada

Nada está escrito y si está escrito
se borra. Seré cadáver pero amanece
y si amanece se puede. Pero encadena
la costumbre porque ata
manos en la nada donde nada existe
y sin embargo, cada vez que abro los ojos
la hoja esta en blanco y yo soy libre
pero aprendí a no serlo y no sabría


Fotografía: Yo (y mi corazón azulgrana)





















1.11.12

Sisters

Noviembre. Prudencia se ha instalado en casa para poner todo patas para arriba.

Dolores lloriquea -¡Pero, Prudencia! ¿Cómo querés que haga para olvidarlo si deseo tanto a ese hombre... ? lo amo con completa locura y en secreto...

Prudencia la mira y con firmeza exclama: -No dezéez, toma. Zi no puedez tomar, no dezeez. No amez en zecreto. Zi no puedez dezirlo, no amez. 

Penélope, en el sillón de la sala, tejía su trigésima séptima manta mientras escuchaba la discusión. Hasta que no pudo contenerse
-¡No escuches a la recién llegada, Dolores, no sufras! Tené fe. Sé paciente. Pronto tu amor se iluminará. Si aprendés a esperar llegará el día en que él se fijará en vos, y como ese azahar que tanto te gusta, estallarán en flor. Sus cuerpos se unirán como conejos hambrientos correteándose en el parque, bajo la oscuridad de la noche y serán felices manoseándose obscenos frente a la mirada amarga de los prudentes! y si me permiten, digo yo ¿qué es eso de ze zezze zozo? Ya basta, esto no es serio.

- ... zi zeráz zorra...- susurró entre dientes Prudencia, sin bajar la mirada que comenzaba a llenarse de nubarrones negros

Dolores y Penélope llevan sus manos a la boca y sueltan una ruidosa carcajada. Penélope repite sin parar "zo.. zo ze que zi, zo ze que zi, jajaja"

-¡Ya basta! -dice Dolores, llorando de risa- ¡me hacés reír tanto que me haré pis!-

Prudencia, con ceremonia, se dirigió hacia la canasta con lanas de Penélope, eligió el ovillo blanco mas grueso y comenzó a envolver a la tejedora, que yacía ahora en el piso, paralizada, tras un certero ¡ZAZ! arrojado con la palma de canto en la garganta.
Desde los dedos del pie hasta la nariz respingada, Prudencia hacia de Penélope un lanudo capullo, mientras desoía el doloroso llanto de Dolores, que observaba en silencio, acurrucada en un rincón de la habitación.





Fotografia: Kristamas

28.10.12

Lo que falta (o lo que queda)

Está 
el aroma del Sol que cae 
en la tarde, es primavera
termina el día, llego 
a casa, enciendo luces 
me cambio la ropa y pienso
qué cenaré. Solo lo pienso 
y tomo un libro, de los suyos 
me hundo en el silencio
que él me ha dejado
Porque todo está en su lugar
también su ausencia.

























Fotografía: Francesca Woodman